La educación va unida al despertar de la consciencia
— Rudolf Steiner

Pedagogía Waldorf

El enfoque educativo de la pedagogía busca despertar el desarrollo integral del niño/a, cognitivo, emocional y físico, respetando cada etapa evolutiva de su crecimiento. Basada en la antroposofía planteada por Rudolf Steiner, la educación Waldorf fomenta la creatividad, la autonomía, el pensamiento crítico y la conexión con la naturaleza y la comunidad.

Una mujer y una niña están oliendo una hoja de maíz en un ambiente interior.

A través de la integración del arte, las ciencias, las humanidades y las actividades manuales buscamos que el aprendizaje sea vivencial y significativo. De este modo, los niños/as no solo adquieren conceptos, sino que desarrollan habilidades sociales, sensibilidad artística y valores humanos que se quedan para toda la vida.

En los salones de clase, los maestros/as son modelos y guías. A través de un estudio profundo sobre las distintas etapas de desarrollo, el maestro/a acompaña al niño en cada grado con un interés genuino por comprender su individualidad y así favorecer su camino a la autonomía, la responsabilidad y hacia la libertad.

Una mujer y cuatro niños en un bosque, la mujer lidera y los niños la siguen formando una fila, todos sonriendo y sosteniéndose de las manos.

¿Cómo nace la pedagogía Waldorf?

La pedagogía Waldorf se basa en las ideas, enseñanzas y principios educativos delineados por el innovador filósofo, activista y creador de la antroposofía, Rudolf Steiner. La primera escuela Waldorf nace en 1919 en Stuttgart, Alemania, cuando Rudolf Steiner, fue invitado por Emil Molt, dueño de la fábrica de cigarrillos Waldorf-Astoria, a crear una escuela para los hijos/as de sus trabajadores. De este impulso surgió un nuevo enfoque educativo que busca formar seres humanos libres, creativos y conscientes, desarrollando equilibradamente el pensar, el sentir y la voluntad. Desde entonces, las iniciativas basadas en la pedagogía Waldorf-Steiner se han extendido por todo el mundo, adaptándose a las culturas y tiempos actuales, pero conservando su esencia: educar para la vida desde una comprensión profunda del ser humano.